lunes, 10 de junio de 2013

¿Qué pasa con la palabra bullying?


¿A alguien le molesta que se use la palabra “bullying”?

Bullying por acá, bullying por allá y bullying por todos lados. Nuestros padres, hermanos, vecinos, conocidos, hijos o cualquier persona usa ya esta palabra para indicar algún tipo de violencia. Es increíble el grado de penetración que ha alcanzado este vocablo en la sociedad mexicana. Desconozco el grado en el que se emplea en otros países de habla hispana.

¿Quienes son los responsables?

Cada parte de la sociedad mexicana tiene cierto grado de responsabilidad pero sin duda alguna hay sectores que han aportado más a este fenómeno.

Empecemos por los medios de comunicación ¡Si! Ellos tienen mucho de responsabilidad al mencionar en cada noticia referente...
al tema esta dichosa palabra. A pesar de que se saben como líderes de opinión en muchas esferas de la vida mexicana (aunque a muchos les pese y duela esto), no cuidan lo que dicen y por lo tanto no miden el alcance de su forma de hablar. Gente como López Doriga, Carmen Aristegui, Adela Micha, Carlos Loret de Mola, Javier Alatorre y otros tantos que existen en televisión, en la radio y en la prensa escrita incluyen esta palabra en las noticias y reportajes que difunden “mal educando” así a nuestra masa poblacional a tal grado que se olvidan que el español cuenta con palabras como violencia, agresión o intimidación para referirse a este fenómeno.

El sector político también es responsable ya que el impacto que el discurso que manejan es tremendo. Nuestros gobernantes y dirigentes usan esta expresión cuando las circunstancias lo ameritan. ¡Nuestro propio presidente la emplea!

Muchos intelectuales también se han dejado influenciar por este fenómeno y dejan de lado sus sobradas capacidades de comunicación para incluir en su vocabulario esta palabra.

Por último haré mención del sector educativo. Es penoso saber que profesores, directores, pedagogos, psicólogos, instructores y cualquier persona relacionada con el área académica cuentan con esa palabra lista para usarla en las conversaciones que tienen con padres de familia y alumnos.

Todas estas personas son líderes de opinión en sus respectivos entornos y la población que está bajo su influencia se ve bombardeada con estas nueva palabra que muchas veces no comprenden en su verdadero significado y mucho menos la pueden pronunciar y que sin embargo la aplican en sus conversaciones de manera seria o de forma jocosa.

Incluso en mi propia casa se da este fenómeno. Mi hijo se queja de “bullying” cuando se le manda hacer alguna cosa y mi mujer, cuando le he hablado de este tema, expresó que deberíamos comprender a los pobrecitos comunicadores que trabajan en la televisión porque no saben lo que dicen, con un tono que se acercaba mas a la compasión que a la indignación.

Para terminar solo me queda decir que no pretendo infligir daño alguno a la palabra misma ya que los cualquier persona de habla inglesa tiene todo el derecho de emplearla o incluso nosotros mismos pero por ningún motivo debemos sobreponerla frente a nuestro propio vocabulario. Solo quiero plantear algunas preguntas para que sean respondidas por cada uno de los que han leído este texto.

¿Nosotros tenemos la necesidad de usar esa palabra porque no contamos con opciones? ¿Nuestro vocabulario es tan pobre que no incluye palabras que tengan ese significado?

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